Cautivada por sonidos
Regalaba palabras
Formulaba
Puentes en individuos
De silencios
Compartidos
Pero
Se le murió la poesía
Nadie se dio cuenta
Sola
Pasó noches
Sedienta de emociones
Se le murió la poesía
Gritaron ángeles
Tiempo
Después vieron
Muertes en el cielo
Ahogada en su pieza
Dedos dormidos
Pensaba
Escribir
Y no podía
Hasta que le susurró la vida
Entonces escribió:
“Que Jesús baje y nos viole a todos para que recordemos que es lo que se siente vivir a corazón honesto
¿Reconoces al amor asustado?
Ese que tiembla al avistar
Un grado de libertad
Aquél que se retuerce al ver
Una mujer cantando al amanecer
(Canciones que tengan que ver
Con cualquier cosa menos con él)
¿Reconoces al amor viejo?
Ese que no se arruga por el tiempo
Sino de estreñimiento al leer
Que le importa todo menos las
(Canciones que tengan que ver
Con cualquier cosa menos con él)
¿Reconoces al amor inseguro?
Ese que te tropieza la decencia
De abrirte a sueños mojados
De independencia
Ese que te canta canciones con placer
Obviamente solo si tienen que ver con él
¿Reconoces al amor pródigo?
Ese que vuelve
Aún sin haberse ido
Ese que vuelve
Aún sin haberse ido
Ese que soñando
Despierta en vano
Con un amanecer
En su mano
Ese que es alivio
Y lluvia sobre carrusel
Para tus dedos tibios por
Humedad que no tiene nada que ver con él”
La poetisa retomó el vuelo
Se sintió libre
“Leo señales”
Habrá dicho
Mientras el diablo
Le cavaba el nicho
Aprendió tonadas
Que dedicó
La punta de la Lengua
Se le dividió
Y causó tanto dolor
Que en el cielo, en la naturaleza y en el miedo
Dios murió
Ella bailó el contorno del sexo
De Leviatan
Sin siquiera recordar
El cantar de los cantares
Que alguna vez solió y le solían
Recitar
Orfeo, Orfeo
¿Dónde estás que no te veo?
En algún segundo el alma
De la poetiza fraseó
Mientras en caída libre
Rozaba el plexo de espigas
De la canción
Que Orfeo mismo
Tantas veces le dedicó
Oliendo mierda tricolor
Escuchó a lo lejos su canción
Ella devolvió insultos
Ella quería quemarse con Cancerbero
Ella quería matar al mismo Orfeo
Ella se anunciaba libre
Mientras cadenas
Afixiaban la pureza restante
De sus ahoagadas penas
Orfeo vendió su alma
A cambio de lo que de la de su amada poetisa quedara
Orfeo esperó escuchar de la poetisa que pasó
Orfeo en la incertidumbre sufrió y sufrió
Orfeo vivió todas las noches restantes sumergido en su propio mar de lágrimas
La poetisa aún no encuentra las palabras